Es una pipa muy bonita, el vidrio, excepcional (como todas las pipas GRAV), sin embargo, el diseño de la chimenea es algo extraño. La cazoleta es bastante grande y puedes poner una cantidad de flor considerable, pero el agujero del hornillo (donde se acumula el humo antes de ser inhalado) deja pasar mucha flor fresca y ceniza al mismo tiempo. Para cuando le das la calada, ya te tragaste tres cenizas y dos pedazitos de flor. Aun así las caladas son limpias y frescas. El tamaño de la boquilla permite que el humo se enfríe bastante bien y si no fuera por qué te tragaste ceniza, no te rasparía nada.
Aún así, es divertida de usar y sí te sientes como el mago gris de la tierra media mientras la usas.